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A propósito de “8 fotógrafos / 5 días”




 

Esta muestra es  el resultado de un viaje al otro lado deltiempo, de la humanidad anclada a sus costumbres y a su cotidianeidad.
Nuestra intención nunca fue hacer fotografías para ésta u otra exposición. Es el resultado de cargar la cámara a diario, una especie de electrodoméstico de la memoria, un apunte de viaje, un borrador imaginario. Una suerte de película del cine mudo, una sorpresa a nuestros ojos, un impacto de todo lo anterior a nuestra cultura.
Cuando flotaba sobre el estrecho de Gibraltar y el sol nos iluminaba con su luz de primavera atravesando de un ala a la otra el Air France blanco, supe que estaba ad portas de aterrizar en un mundo fantástico. Apenas llegamos y empezamos a descender por una escalera cubierta y transparente me di cuenta que necesitaba fotografiar todo lo que veía, las palmeras, los otros aviones, un helicóptero a lo lejos. Inmediatamente suena un silbato y una mano gruesa me tapa el lente, el hombre exigía que le mostrara las fotos para borrarlas y yo, tratando de hacerle entender que no eran digitales sino en película mientras devolvía lentamente el film. Solamente me entendió cuando le dije en portugués que no había tirado la foto y me dejó ir sin antes advertir lo que me esperaba después...
Esa misma tarde frente al Parlamento marroquí y al hotel Balima donde hospedábamos, nos encontramos con una manifestación de hombres y mujeres ciegos los cuales cantaban y gritaban eufóricamente; saqué mi cámara y tiré fotografías con un poco de miedo, la gente me miraba dudosamente...
A veces hay que preguntarse para qué y para quién se fotografía, y eso me pasó justamente en este encuentro con un mundo detenido en el tiempo, simbólico y rico en cultura e historia. Recuerdo nunca antes haber vivido algo así, ese sentimiento de volver a ser, a nacer, a abrir por primera vez los ojos, de estar entrando al tiempo de nunca más volver.
Puede ser que hayan sido tan pocos días para tantos fotógrafos, pero en cada uno de nosotros nos queda el sentimiento de querer volver allá para una larga estadía de trabajo. Veremos que nos depara esta suerte de lazo de hermandad y complicidades visuales.
   Claudio Pérez


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